EL RECUERDO DE WILLIAMS

Vivir del pasado es un mal negocio en un mundo donde el objetivo es derrocar al tiempo. A Williams empezaba a ocurrirle. Sus coches se quedaron sin pegatinas, porque el pasado resplandecía, sí, sin embargo, el presente se tornaba de un tono grisáceo. La tragedia de Sir Frank era que el recuerdo empezaba a valer más que su equipo. Un síntoma terrible para una escudería legendaria.

Los libres de Australia le han devuelto a los chicos de Grove el brillo perdido durante demasiadas temporadas mediocres. Nico Rosberg ha encabezado la clasificación de tiempos en las dos sesiones, confirmando los indicios que situaban a Williams como una de las sorpresas de la temporada. Ha bastado un cambio drástico en el reglamento, un cuerpo de ingenieros con talento y un difusor bajo sospecha para devolver a la escuderia de Sir Frank y Patrick Head al lugar que le corresponde por currículum.

El primer día del primer gran premio del Mundial 2009 deja algunas conclusiones: 1. El difusor de Williams, BrawnGP y Toyota lo va a copiar hasta el Tato. Los seis monoplazas sospechosos se han metido entre los siete primeros clasificados. 2. McLaren está remantadamente mal. Hamilton ha firmado el 16º y 18º lugar. Malas noticias para la escudería que luce el 1 en el morro. 3. Renault está donde esperaba. Alonso está a un suspiro de Ferrari y metido en el grupo de los equipos sin el superdifusor.

En todo caso, los viernes, viernes son. Pese a todo lo visto en los libres (por cierto, sin problemas en la web de La Sexta), el verdadero test llegará mañana con los entrenamientos oficiales.